"Assassins" empieza en una galería de tiro al blanco de una feria. Uno por uno, una "colección de desadaptado"s entran en la galería, el administrador del lugar los invita a jugar prometiéndoles que todos sus problemas serán resueltos si matan al presidente.
Los personajes entran a escena como "clientes" de esta línea de tiro: Leon Czolgosz ( el asesino del presidente William McKinley), John Hinckley (quien intentó asesinar al presidente Ronald Reagan), Charles Guiteau (el asesino del presidente James A. Garfield) , Giuseppe Zangara (asesino que se presume intentó matar a Franklin Delano Roosevelt), Samuel Byck (secuestrador de un avión que intentaba estrellar en la Casa Blanca en tiempo de Richard Nixon), Lynette "Squeaky" Fromme( una mujer acusada en 1975 de planear un atentado contra Gerald Ford) y Sara Jane Moore (también acusada de intentar matar a Ford).
El último en entrar a escena es John Wilkes Booth (El asesino de Lincoln).
El trovador cuenta la historia de John Wilkes Booth: Booth está escribiendo su justificación para el asesinato en su diario, Balladeer interviene diciendo que los motivos de Booth en realidad tienen más que vercon sus problemas personales. Cuando Booth es herido por un soldado de la Unión le lanza a Balladeer su diario para que pueda contar su historia al mundo. El trovador lee la auto-justificación de Booth mientras Booth se suicida. El trovador llega a la conclusión de que Booth era un loco, cuyo legado fue una traición a la patria y que al tratar de destruir a Lincoln, Booth se convirtió en leyenda.
En la tercera escena Booth, Czolgosz, Hinckley, Zangara y Guiteau están juntos en un bar. Byck entra y pregunta si Richard Nixon ha estado en el bar ultimamente, se va cuando recive una respuesta negativa. Guiteau brinda por el "American Dream" contando su ambicioso plan de convertirse en embajador de Francia. Zangara se queja por dolores de estómago y Booth propone que se cure "disparando al presidente". Hinckley rompe accidentalmente una botella de cerveza y Czolgosz describe los horrores que ve en la fábrica de botellas en donde trabaja, narrando cuantos hombres mueren o se lastiman por hacer una simple botella como la que Hinckley rompió. Booth lo incita a tomar control de su destino y a romper una botella el mismo, pero Czolgosz no logra hacerlo.
En la escena cuatro hay un reporte de radio que cuenta que Zangara intentó asesinar a Franklin D. Roosevelt. Cinco testigos cuentan su versión del evento; cada uno está convencido de que él o ella personalmente han salvado al presidente. Desde una silla eléctrica Zangara canta su negación a sentir miedo y que no le importa quien haya muerto siempre y cuando fuera alguno de los que controlan el dinero. Zangara es electrocutado.
La anarquista Emma Goldman, en la quinta escena hace una lectura mientras Leon Czolgosz escucha. Leon se presenta a Emma y le declara su amor. Ella lo invita a "re enfocar su pasión a la lucha por la justicia social"
En la escena seis Lynette Fromme y Sara Jane Moore hablan sobre Charles Manson, el "carsimático asesino". Una escena después Czolgosz reflexiona sobre la cantidad de hombres que mueren en las minas de donde se obtienen los metales para hacer pistolas. Guiteau y Moore entran y añaden a la reflexión el poder que tiene una pistola para cambiar al mundo. Czolgosz decide que su pistola clamará solo una víctima: el presidente.
Czolgosz acude a la Pan American Exposition y observa a McKinley dar la mano a los visitantes; Czolgosz se acerca y le dispara.
En la escena nueve Samuel Byck se sienta en una banca del parque vestido con un sucio traje de Santa Claus. Byck tiene una grabadora en la mano en donde prepara un mensaje para Leonard Bernstein diciéndole que el puede salvar al mundo escribiendo mas canciones de amor. Luego acusa a Bernstein de ignorarlo "igual que todas las otras celebridades".
Squeaky Fromme y John Hinckley se sientan juntos en la escena diez; intercambian reflexiones sobre sus "amores" Charles Manson y Jodie Foster.
Fromme critica a Hinckley por enamorarse de una mujer a la que no conoce y él termina por correrla. Cuando ella se va, Hinckley canta, Fromme regresa a cantar con él su amor por Manson. Hinckley dispara a una fotografía de Ronald Reagan proyectada en la pared pero la fotografía continúa apareciendo, Hinckley tira una y otra vez pero sigue fallando.
En la escena once Charles Guiteau intenta seducir a Sarah Jane Moore. Finalmente es rechazado y Guiteau se encuentra con James Garfield en la estación del tren. Guiteau le pide ser embajador de Francia, cuando es rechazado le dispara al presidente.
Guiteau, en la escena siguiente está al pie de la horca cantando un poema que escribió esa mañana llamado: "I Am Going To The Lordy"; algo así como "me voy con el Diosito". El baladista describe su juicio y ejecución mientras Guiteau canta subiendo a la horca, finalmente es ahorcado.
Squeaky Fromme y Sara Jane Moore se preparan para matar a Ford. Moore trae a su hijo de nueve años y a su perro. El presidente entra y ayuda a Moore a levantar las balas que se le calleron, falla en su intento de asesinarlo; Fromme lo intenta pero su pistola falla.
Samuel Byck va camino al aereopuerto a secuestrar su avión, que planea estrellar en la Casa Blanca. Graba un mensaje a Richard Nixon quejándose sobre la vida americana actual y anuncia que la única manera de solucionarlo es matando al presidente.
En la escena 15 los asesinos reiteran sus motivos y exigen una recompensa. El Baladista les dice que sus acciones no resolvieron sus problemas o los problemas del país y que si ellos querían su recompensa deben seguir el "Sueño Americano". Los asesinos se dan cuenta que nunca recibirán su recompensa y se unen cantando "una canción para ser cantada por todos los estadounidenses desposeídos por el sueño" para obligar al Baladista a bajar del escenario
Lee Harvey Oswald aparece en la escena 16, preparándose para matarse. Booth lo interrumpe y lo convence de matar a John F. Kennedy. Acompañado de los otros asesinos desde las sombras, Booth le dice a Oswald que uniéndose a ellos se convertirá en parte de la experiencia americana, pero Oswald se niega. Booth presiona ofreciendo un futuro famoso a Oswald y diciéndole que la llave del futuro está en sus manos, los asesinos cantan e imploran a Oswald que actúe, Oswald dispara desde una ventana.
Para la versión inglesa se añadió una escena en la que seis estadounidenses cuentan qué hacián y en dónde estaban cuando los presidentes Kennedy, Garfield, McKinley y Lincoln fueron asesinados.
Los asesinos reaparecen en la escena 18, ahora Oswald está con ellos, cantan el tema "Everybody's got the right to be happy":
Sondheim participó como panelista en un laboratorio de teatro musical del productor Stuart Ostrow, el director general de "Frank Music Corporation" la empresa productora de Frank Loesser("Guys and Dolls").
Durante este laboratorio Sondheim leyó un de Charles Gilbert; Sondheim y John Weidman le pidieron a Gilbert permiso para utilizar su idea en un musical. Weidman había sido colaborador de Sondheim años atrás, juntos habían hecho en los setentas "Pacific Overtures" con la que Weidman había ganado su primer Tony. Para entonces Weidman ya había ganado un segundo Tony por las adaptaciones al libreto de "Anything Goes" que había hecho para el "revival" de 1987.
"Assassins" se estrenó off-Broadway en diciembre de 1990 y dió setenta y tres presentaciones, el director fue Jerry Zak (ganador de dos Tonys por el revival de "Guys and Dolls" de 1992). El elenco estuvo conformado por Victor Garber (Jesús en la versión filmica de "Godspell"), Terrence Mann (el Javert original de Broadway -nominado al Tony por ese personaje en 1987- interpreta a Chauvelin en el disco del elenco original de "The Scarlet Pimpernel") y Debra Monk (nominada recientemente al Tony por "Curtains" la última obra de Kander y Ebb). La temporada se agotó.
En 1992 el musical se estrenó en Londres y cerró en 1993 después de 76 funciones.
Recientemente la "Roundabout Theater Company" hizo un "revival" que originalmente se estrenaría en 2001, el atentado a las Torres Gemelas provocó un retraso de tres años pues los productores consideraron que el tema no era adecuado para la situación histórica de los Estados Unidos.
El director de este revival fue Joe Mantello (el director de "Wicked"). La obra se presentó en el "Studio 54" y fue protagonizada por Neil Patrick Harris que interpretó al Baladista y a Lee Harvey Oswald. En este montaje también participó
Michael Cerveris quien ganó un Tony por su interpretación de John Wilkes Booth.
Los personajes entran a escena como "clientes" de esta línea de tiro: Leon Czolgosz ( el asesino del presidente William McKinley), John Hinckley (quien intentó asesinar al presidente Ronald Reagan), Charles Guiteau (el asesino del presidente James A. Garfield) , Giuseppe Zangara (asesino que se presume intentó matar a Franklin Delano Roosevelt), Samuel Byck (secuestrador de un avión que intentaba estrellar en la Casa Blanca en tiempo de Richard Nixon), Lynette "Squeaky" Fromme( una mujer acusada en 1975 de planear un atentado contra Gerald Ford) y Sara Jane Moore (también acusada de intentar matar a Ford).
El último en entrar a escena es John Wilkes Booth (El asesino de Lincoln).
El trovador cuenta la historia de John Wilkes Booth: Booth está escribiendo su justificación para el asesinato en su diario, Balladeer interviene diciendo que los motivos de Booth en realidad tienen más que vercon sus problemas personales. Cuando Booth es herido por un soldado de la Unión le lanza a Balladeer su diario para que pueda contar su historia al mundo. El trovador lee la auto-justificación de Booth mientras Booth se suicida. El trovador llega a la conclusión de que Booth era un loco, cuyo legado fue una traición a la patria y que al tratar de destruir a Lincoln, Booth se convirtió en leyenda.
En la tercera escena Booth, Czolgosz, Hinckley, Zangara y Guiteau están juntos en un bar. Byck entra y pregunta si Richard Nixon ha estado en el bar ultimamente, se va cuando recive una respuesta negativa. Guiteau brinda por el "American Dream" contando su ambicioso plan de convertirse en embajador de Francia. Zangara se queja por dolores de estómago y Booth propone que se cure "disparando al presidente". Hinckley rompe accidentalmente una botella de cerveza y Czolgosz describe los horrores que ve en la fábrica de botellas en donde trabaja, narrando cuantos hombres mueren o se lastiman por hacer una simple botella como la que Hinckley rompió. Booth lo incita a tomar control de su destino y a romper una botella el mismo, pero Czolgosz no logra hacerlo.
En la escena cuatro hay un reporte de radio que cuenta que Zangara intentó asesinar a Franklin D. Roosevelt. Cinco testigos cuentan su versión del evento; cada uno está convencido de que él o ella personalmente han salvado al presidente. Desde una silla eléctrica Zangara canta su negación a sentir miedo y que no le importa quien haya muerto siempre y cuando fuera alguno de los que controlan el dinero. Zangara es electrocutado.
La anarquista Emma Goldman, en la quinta escena hace una lectura mientras Leon Czolgosz escucha. Leon se presenta a Emma y le declara su amor. Ella lo invita a "re enfocar su pasión a la lucha por la justicia social"
En la escena seis Lynette Fromme y Sara Jane Moore hablan sobre Charles Manson, el "carsimático asesino". Una escena después Czolgosz reflexiona sobre la cantidad de hombres que mueren en las minas de donde se obtienen los metales para hacer pistolas. Guiteau y Moore entran y añaden a la reflexión el poder que tiene una pistola para cambiar al mundo. Czolgosz decide que su pistola clamará solo una víctima: el presidente.
Czolgosz acude a la Pan American Exposition y observa a McKinley dar la mano a los visitantes; Czolgosz se acerca y le dispara.
En la escena nueve Samuel Byck se sienta en una banca del parque vestido con un sucio traje de Santa Claus. Byck tiene una grabadora en la mano en donde prepara un mensaje para Leonard Bernstein diciéndole que el puede salvar al mundo escribiendo mas canciones de amor. Luego acusa a Bernstein de ignorarlo "igual que todas las otras celebridades".
Squeaky Fromme y John Hinckley se sientan juntos en la escena diez; intercambian reflexiones sobre sus "amores" Charles Manson y Jodie Foster.
Fromme critica a Hinckley por enamorarse de una mujer a la que no conoce y él termina por correrla. Cuando ella se va, Hinckley canta, Fromme regresa a cantar con él su amor por Manson. Hinckley dispara a una fotografía de Ronald Reagan proyectada en la pared pero la fotografía continúa apareciendo, Hinckley tira una y otra vez pero sigue fallando.
En la escena once Charles Guiteau intenta seducir a Sarah Jane Moore. Finalmente es rechazado y Guiteau se encuentra con James Garfield en la estación del tren. Guiteau le pide ser embajador de Francia, cuando es rechazado le dispara al presidente.
Guiteau, en la escena siguiente está al pie de la horca cantando un poema que escribió esa mañana llamado: "I Am Going To The Lordy"; algo así como "me voy con el Diosito". El baladista describe su juicio y ejecución mientras Guiteau canta subiendo a la horca, finalmente es ahorcado.
Squeaky Fromme y Sara Jane Moore se preparan para matar a Ford. Moore trae a su hijo de nueve años y a su perro. El presidente entra y ayuda a Moore a levantar las balas que se le calleron, falla en su intento de asesinarlo; Fromme lo intenta pero su pistola falla.
Samuel Byck va camino al aereopuerto a secuestrar su avión, que planea estrellar en la Casa Blanca. Graba un mensaje a Richard Nixon quejándose sobre la vida americana actual y anuncia que la única manera de solucionarlo es matando al presidente.
En la escena 15 los asesinos reiteran sus motivos y exigen una recompensa. El Baladista les dice que sus acciones no resolvieron sus problemas o los problemas del país y que si ellos querían su recompensa deben seguir el "Sueño Americano". Los asesinos se dan cuenta que nunca recibirán su recompensa y se unen cantando "una canción para ser cantada por todos los estadounidenses desposeídos por el sueño" para obligar al Baladista a bajar del escenario
Lee Harvey Oswald aparece en la escena 16, preparándose para matarse. Booth lo interrumpe y lo convence de matar a John F. Kennedy. Acompañado de los otros asesinos desde las sombras, Booth le dice a Oswald que uniéndose a ellos se convertirá en parte de la experiencia americana, pero Oswald se niega. Booth presiona ofreciendo un futuro famoso a Oswald y diciéndole que la llave del futuro está en sus manos, los asesinos cantan e imploran a Oswald que actúe, Oswald dispara desde una ventana.
Para la versión inglesa se añadió una escena en la que seis estadounidenses cuentan qué hacián y en dónde estaban cuando los presidentes Kennedy, Garfield, McKinley y Lincoln fueron asesinados.
Los asesinos reaparecen en la escena 18, ahora Oswald está con ellos, cantan el tema "Everybody's got the right to be happy":
Sondheim participó como panelista en un laboratorio de teatro musical del productor Stuart Ostrow, el director general de "Frank Music Corporation" la empresa productora de Frank Loesser("Guys and Dolls").
Durante este laboratorio Sondheim leyó un de Charles Gilbert; Sondheim y John Weidman le pidieron a Gilbert permiso para utilizar su idea en un musical. Weidman había sido colaborador de Sondheim años atrás, juntos habían hecho en los setentas "Pacific Overtures" con la que Weidman había ganado su primer Tony. Para entonces Weidman ya había ganado un segundo Tony por las adaptaciones al libreto de "Anything Goes" que había hecho para el "revival" de 1987.
"Assassins" se estrenó off-Broadway en diciembre de 1990 y dió setenta y tres presentaciones, el director fue Jerry Zak (ganador de dos Tonys por el revival de "Guys and Dolls" de 1992). El elenco estuvo conformado por Victor Garber (Jesús en la versión filmica de "Godspell"), Terrence Mann (el Javert original de Broadway -nominado al Tony por ese personaje en 1987- interpreta a Chauvelin en el disco del elenco original de "The Scarlet Pimpernel") y Debra Monk (nominada recientemente al Tony por "Curtains" la última obra de Kander y Ebb). La temporada se agotó.
En 1992 el musical se estrenó en Londres y cerró en 1993 después de 76 funciones.
Recientemente la "Roundabout Theater Company" hizo un "revival" que originalmente se estrenaría en 2001, el atentado a las Torres Gemelas provocó un retraso de tres años pues los productores consideraron que el tema no era adecuado para la situación histórica de los Estados Unidos.
El director de este revival fue Joe Mantello (el director de "Wicked"). La obra se presentó en el "Studio 54" y fue protagonizada por Neil Patrick Harris que interpretó al Baladista y a Lee Harvey Oswald. En este montaje también participó
Michael Cerveris quien ganó un Tony por su interpretación de John Wilkes Booth.
1 comentario:
Tuve la oportunidad de verlo en 2004 dos veces. Impresionante.
El primer día, la dirección era de Paul Geminiani (la segunda no, porque Geminiani estaba en el Lincoln Center dirigiendo "The Frogs").
Hay que ver que diferencia en el pulso musical. La experiencia de Geminiani interpretando las partituras de Sondheim es incuestionable y diría que insuperable. Lo tenía a la vista mientras dirigía el grupo instrumental y funcionaba de memoria, dándole a la interpretación una dinámica increible. (I was there)
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